Elementos para ser un buen barber
1. Poseer bases sólidas
Trabajar en la cabeza de las personas implica el riesgo permanente de desilusionar a tus clientes con el resultado final, ya que un mal corte de pelo o un mal arreglo de barba es difícil de arreglar y se debe esperar a que crezca. Pero si conoces las mejores técnicas y una comprensión de los que significa el negocio de la peluquería, tus probabilidades de conformar al cliente son altas, para ello es importante conocer perfectamente que es lo que tu cliente espera
​
​
​
​
​
​
​
​
2. Actualizar los conocimientos
La educación continua es fundamental en cualquier rubro y la peluquería o barbería no escapa a esta regla. A menudo, los clientes querrán que les realices un corte de moda o que dejes su barba simplemente espectacular, por lo cual es recomendable realizar cursos de actualización sobre las últimas tendencias para satisfacer las nuevas demandas que van surgiendo año a año, además de conocer los nuevos productos que están en el mercado para satisfacer las necesidades de tus clientes, proveerlos de ellos para que el cuidado de su barba y cabello los tenga satisfechos y regresen a tu establecimiento
​
3. Proyectar una buena actitud
El trato con el público implica que tu humor siempre debe estar balanceado. Es importante que los clientes perciban tu disposición para comprender exactamente qué quieren hacerse en la cabeza o barba, así como tu energía para convertir la experiencia de la peluquería en un momento de cuidado y realización personal. En todo negocio funciona de la misma manera: si el cliente se sintió a gusto, volverá.
​
4. Apelar a la flexibilidad
El cabello es importante para la imagen personal así mismo una buena barba perfectamente delineada y cuidada, pero muchas veces los clientes deberán posponer las citas por cuestiones laborales o familiares a las que darán prioridad. Manifestá tu comprensión y ofrece otra posibilidad para reagendarse. Es preferible tener un poco de paciencia que perder al cliente, ya que hay muchas peluquerías o barberías que brindan excelentes servicios y para mantener la competitividad, deberás resaltar por tu trabajo pero también generar un vínculo con los clientes, aprende a ofrecer a tus clientes bebidas refrescantes que permitan que su estancia en tu negocio sea placentera, incluso música o el televisor con programas adecuados para el publico masculino
5. Aprender a escuchar
Muchas personas van a la peluquería no solo para cambiar su cabello, sino para participar de reuniones sociales. Es una parte inherente del oficio aunque debes ser capaz de concentrarte en tu trabajo sin desatender lo que el cliente está compartiendo contigo. Se requiere de una gran habilidad para fragmentar la mente en distintos puntos de atención, pero deberás aprenderlo si quieres mantener la clientela.
​
6. Comprender el poder de transformación
Quienes asisten a una peluquería o barbería frecuentemente buscan realizar cambios totales de aspectos como modificar su estilo o dejarse crecer la barba. Los cambios profundos de apariencia frecuentemente se asocian a un deseo de modificar algún aspecto de la vida, por eso tu trabajo tiene implicaciones psicológicas sobre la auto-concepción y la percepción del resto. Por lo tanto, serás un muro de contención para ciertos clientes y en algunos casos, la llave hacia el intento de una nueva vida.
7. Leer entre líneas
Una vez que el cliente explicó que quiere hacerse en la cabeza, tendrás que saber cómo utilizar la información teniendo en cuenta aquellos aspectos que no mencionó pero son inherentes a su pedido. Los conocimientos serán tu fuente de consulta permanente para comprender todas las implicaciones que conlleva un color, un corte, un peinado o un cambio de textura.
​
8. Personalizar el trabajo
Un corte de pelo excéntrico puede verse increíble en un cantante famoso pero no siempre quedará del mimo modo en todos los clientes. Es fundamental observar el cabello de la persona, la forma del rostro, sus rasgos, la tez, la contextura física e incluso la personalidad para determinar si realmente ese corte la hará tan feliz como imagina. Tu trabajo es encontrar las características únicas del cliente para adaptar su pedido a aquello que le sentará bien.
9. Actuar como un escultor
Ser peluquero y barbero requiere la capacidad de visualizar lo que se quiere producir en una masa informe. Deberás tener claro el resultado antes comenzar a trabajar, observando con detenimiento la forma actual del cabello para llevarlo hasta la escultura que te imaginás.
“Para los buenos profesionales hay empleo seguro, rápido y bien remunerado” - Juan Carlos Fontclara, Director de la Universidad de Peluquería y Estética (ESCA)
​
10. Pensar como un artista
Debes tener en cuenta que tu obra andara por ahí y que sera publicidad para ti, por lo que debes tomar en cuenta que entre mejor quede será mejor la publicidad que dara a tu negocio.
11. Crear como un diseñador
Si bien algunos peluqueros prefieren mantenerse en los estilos clásicos o aquellos que dominan a la perfección, la creatividad es una cualidad indispensable para quienes trabajan sobre la imagen personal.
​
12. Manejar la presión
Los peluqueros están expuestos a un alto nivel de presión por tratar con la imagen y la autoestima de las personas. El éxito está directamente vinculado con la satisfacción del cliente, por lo cual un mínimo error técnico podría cambiar por completo la idea original y terminar en un problema. Lo principal es no perder la calma: una mente fría piensa mejores soluciones cuando se enfrenta con clientes desconformes. Incluso aunque hayas seguido las instrucciones al pie de la letra, la frustración de no verse como imaginó puede caer contra ti, por eso es importante que estés tranquilo y no te desanimes, sino que adoptes una actitud proactiva.
​
13. Evitar la aprensión a los errores
Es cierto que las equivocaciones en este oficio pueden alterar más al cliente que en otros ámbitos, porque el pelo se asocia a la autoestima de la persona y al concepto que posee sobre sí misma. Sin embargo debes de estar cociente que de los errores se aprende
14. Ser perfeccionista
Cuando termines cada trabajo, revisá absolutamente todos los detalles que conforman el resultado final para asegurarte que haya quedado perfecto, alineado y según el estilo que deseaste .
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
15. Tener tarjetas del negocio
Siempre debes tener tarjetas de presentación, es una buena forma de publicidad y de que tus clientes recuerden tu número para agendar citas.
16. Dar visibilidad en las redes sociales
Sacá fotos del “antes y después” del cliente para subirlas en todas las redes sociales de tu negocio, que sí o sí debés crear para popularizar tu trabajo y captar una mayor cantidad de clientes. Facebook, Twitter y en especial Instagram, serán aliados fundamentales a la hora de divulgar tu trabajo. La peluquería es un oficio que se mide por sus resultados visuales, así que aprovechá las herramientas digitales disponibles y promové tu marca personal en la red. También puedes utilizarlas para comercializar servicios, como ofrecer descuentos, promociones, etcétera.
17. Asistir a ferias especializadas
Son los mejores sitios para encontrarse con colegas dispuestos a conversar sobre las últimas tendencias o técnicas y conseguir descuentos en productos de venta exclusiva a profesionales. Ampliarás tu red de contactos, abastecerás a tu negocio.
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​
​